Los paros parciales del 25 de septiembre fueron solo un aperitivo de lo que el profesorado madrileño tiene preparado para este curso. Ayer, 29 de octubre, las calles de Madrid se volvieron a cubrir de verde con la huelga impulsada por Menos Lectivas y las Asambleas de Centro. Una jornada de lucha histórica, secundada por el 70% de los y las docentes a pesar de las maniobras de la Consejería de Educación, que ha intentado desarticular la movilización con servicios mínimos abusivos.

Durante toda la mañana se han organizado cientos de piquetes muy numerosos y diferentes acciones en los barrios de Madrid. Desde el corredor del Henares, pasando por Carabanchel, Rivas, Moratalaz y San Blas, hasta la Zona sur, con municipios como Fuenlabrada, Leganés y Getafe, donde las protestas han sido masivas. Una de las zonas más movilizadas y con mayor participación ha sido Vallekas, donde la lluvia no ha impedido que más de 200 docentes de Primaria, Infantil y Secundaria nos reuniéramos en una gran asamblea para seguir debatiendo las acciones del 21 de noviembre. Más tarde hemos confluido todas y todos en la Junta Municipal, con una concentración combativa con pancartas donde se leía: ¡Con esta ratio no cabemos ni en el patio! ¡Ayuso escucha, estamos en la lucha!

La fuerza que hemos demostrado en esta jornada es inspiradora y un reflejo del trabajo militante de miles de activistas, profesoras y docentes, por la escuela pública. Ese esfuerzo, esa tarea paciente y desde abajo, nos ha permitido pasar de tener 80 asambleas en los centros en el mes de mayo, ¡a 140 en octubre!

Por la tarde, ha llegado el broche de oro. A pesar de la lluvia, el viento y el frío, una manifestación multitudinaria se ha hecho escuchar desde Atocha hasta Sol. Con un ambiente inmejorable, con centenares de pancartas de las asambleas y paraguas decorados con consignas para la ocasión, 15.000 docentes no hemos dejado de cantar ¡no hay otra manera, o con el Consejero o con las asambleas! ¡Menos lectivas, más calidad! ¡Todos los profesores tenemos un deseo que para la privada no haya dinero! ¡Nada, nada, nada para la concertada! ¡La lluvia no nos para, peor es corregir en un fin de semana!

El éxito de la movilización y la huelga hubiera sido imposible sin el sentimiento de rebelión que existe en el sector educativo contra las políticas de Ayuso y Viciana, que no se cansan de insultarnos y despreciarnos. Pero también, sin la crítica y el desafío cada vez más consciente, por abajo, hacia una estrategia sindical inservible llevada a cabo por las cúpulas de los sindicatos de la Mesa Sectorial. CCOO y UGT, que convocaron esta huelga para tratar de lavarse la cara ante el movimiento docente cuando Consejería rompió las negociaciones, se volvieron a llevar una lección ayer. La burocracia que repite como un mantra que “no hay fuerza” y que por eso hay que aceptar acuerdos de migajas, aislados en la manifestación. Y el bloque de Menos Lectivas, de los que luchan, confían en los trabajadores y se auto-organizan, lleno de miles de personas.

Que tomen buena nota, porque los días en que las direcciones de CCOO y UGT hacían y deshacían a espalda de todas nosotras sin que nadie dijera nada, se acabaron. ¡Se acabó la paz social!

Ahora, el próximo paso está claro: el 21 de noviembre tenemos que repetir y ampliar lo que ha sucedido el 29 de octubre. Llegar a todavía más centros, movilizar a todavía más profesoras, porque, lo que es evidente, es que sólo con la lucha colectiva podremos romper el miedo, estrategias que pretenden dividirnos, y avanzar en nuestras demandas.

El jueves por la mañana, la Mesa Sectorial vuelve a reunirse con el Consejero Viciana. El Gobierno de la CAM ha puesto sobre la mesa un acuerdo para que los profesores de Secundaria, FP y Régimen Especial pasen de 20 a 19 horas a partir del curso 2026/2027 y, como todas nos olemos, no sería de extrañar que los sindicatos que participan en esta negociación lo firmen.

Pero si la Consejería o los dirigentes sindicales que tanto hablan pero tan poco hacen, se creen que van a engañarnos, es que no han aprendido nada de lo que Menos Lectivas significa.

El 21 de noviembre vamos a volver a la huelga y, mientras tanto, seguiremos en los centros, en las asambleas y fortaleciendo nuestro movimiento con un plan de lucha. Para arrancar las 18/23, la contratación de miles de docentes, la reducción real de las ratios y por la dotación efectiva de los centros públicos.

Para eso, nuestra estrategia de lucha tiene que ser lo más contundente posible. El 21N las aulas se paralizarán de nuevo, pero la mejor forma de golpear al Gobierno de Ayuso es unir todas las fuerzas de docentes y estudiantes en una huelga general educativa de 72h, llamando a la solidaridad y a la unidad al resto de las luchas por todos los servicios públicos que también están bajo ataque, como la sanidad pública, el transporte o la vivienda.

Tras una jornada inolvidable, ¡a volver a hacer historia el 21 de noviembre!