Desde el pasado jueves 9 de mayo, decenas de estudiantes y trabajadores malagueños nos hemos encerrado en la Biblioteca de la Universidad de Málaga, tras una manifestación de más de 300 personas por el campus. Además de los cientos de personas que hemos ido pasando por el encierro, hemos recibido la solidaridad masiva de la clase trabajadora de Málaga. Entre otras donaciones, nos han traído frutas, alimentos no perecederos, agua, refrescos, elementos de higiene, mantas, esterillas, colchones, y, ante todo, el apoyo y la fuerza imparable de la clase trabajadora movilizada.
Exigimos la ruptura inmediata de relaciones comerciales, diplomáticas y militares con el estado sionista y genocida de Israel por parte del Estado español. Además, hemos tenido conocimiento de la complicidad de la UMA con la ocupación sionista, que mantiene en este momento, entre otros convenios, un acuerdo de intercambio de estudiantes con las universidades Technion Israel Institute of Technology y con la Universidad de Ben-Gurion del Néguev. Ambas instituciones se jactan de ser potencias en el desarrollo de armamento y drones para masacrar a la población palestina.
Nuestro señalamiento directo a los vínculos de la universidad con el genocidio ha desencadenado una respuesta inmediata por parte del rectorado que deja ver el temor ante la solidaridad que nuestra denuncia ha despertado. Además de eliminar todos los documentos de sus páginas web, la universidad ha empezado una campaña de provocaciones y entorpecimiento de nuestro legítimo derecho de protesta, intentando enfrentarnos con otros estudiantes o trabajadores de la universidad. Ante ello, no caeremos en provocaciones, y mantendremos nuestra protesta, llamando a más sectores y colectivos a unirse en la lucha contra el imperialismo y el capitalismo.
Tenemos una posición muy clara. No nos movemos hasta que la universidad reconozca y rompa los vínculos académicos con el estado de Israel, se posicione abiertamente contra el genocidio y traslade estas exigencias al resto de universidades e instituciones.
Hacemos un llamado a participar en todas las acampadas y encierros que están en marcha, a llenar las universidades de acciones en apoyo al pueblo palestino, y en utilizar toda esta enorme fuerza para forzar al gobierno del Estado español a romper relaciones con Israel.
¡PSOE y SUMAR, basta de complicidad!
¡La UMA tiene que cortar relaciones académicas ya!
¡Viva la lucha del pueblo palestino!