Este lunes 1 de abril las trabajadoras del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD), organizadas en el sindicato CGT, comenzaron una acampada frente a las puertas del Ayuntamiento de Sevilla por la mejora de sus condiciones laborales y por la remunicipalización del servicio.

A las pocas horas, el Ayuntamiento del Partido Popular ordenó retirar las tiendas de campaña y carpas de las compañeras, pero si el PP piensa que puede doblegar así la voluntad de lucha de las trabajadoras del SAD lo lleva claro, tal como las trabajadoras lo están demostrando en este preciso momento.

Este Ayuntamiento representa al señorito sevillano, al especulador de la vivienda, a los latigueros de la hostelería… pero sobre todo a los grandes empresarios, a los Florentino Pérez y sus colegas de las subcontratas.

Sin embargo, la situación de precariedad laboral y privatización del SAD, no es algo nuevo que haya instaurado el PP. También el PSOE, cuando estuvo al ayuntamiento mantenía el SAD y a sus trabajadoras en esta situación. Partidos y gobiernos que se hacen llamar progresistas y feministas, pero que luego permiten a empresas subcontratadas que exploten y destrocen a mujeres trabajadoras mientras se llevan miles de euros en dinero público. ¡Cuánto cinismo!

El servicio de la ayuda a domicilio es un servicio esencial y está en manos privadas. Se trata de un rico negocio que reporta cientos miles de euros en beneficio para toda suerte de empresarios parasitarios. Esto, junto a la falta de inversión, implica que el servicio sea completamente insuficiente: ¡solo durante 2023, 8771 personas han muerto en lista de espera para la atención a la dependencia! Por no hablar de las condiciones laborales. Más de 30.000 trabajadoras en Sevilla se ven abocadas a la máxima precariedad, a sufrir los incumplimientos del convenio, a no descansar, trabajar horas que no se cobran e incluso deberle horas a sus empresas, todo esto sumado a la cantidad de accidentes y enfermedades laborales que se sufren el sector sin que exista ningún tipo de prevención.

Un servicio esencial como es el SAD no puede estar en manos de un oligopolio parasitario: la única solución para parar todo esto es la municipalización, integrar a todas las trabajadoras a la red pública, una demanda que han exigido las trabajadoras del SAD en todo el estado. Es necesario que todos esos recursos que hoy sirven para el lucro de unos pocos se pongan al servicio de la clase trabajadora, para acabar con la precariedad y garantizar un servicio de calidad, con los recursos materiales y necesarios para desempeñar el servicio.

Las trabajadoras del SAD en Sevilla y a nivel estatal están marcando el camino. Para acabar con la privatización y la precariedad necesitamos un sindicalismo de combate, democrático y revolucionario. Un sindicalismo que se enfrente a este puñado de empresarios que nos asfixian a los gobiernos que están a su servicio y que tenga claro que solo la fuerza de la clase obrera en lucha puede arrancar victorias.

¡Adelante la lucha del SAD de Sevilla!

 

Firma aquí en apoyo a la lucha de las trabajadoras del SAD